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El trabajo entre Ingeniero Biomédico, Cirujano Maxilofacial y Odontólogo ofrece un tratamiento customizado en lesiones secundarias al cáncer y otras patologías

El Servicio de Cirugía Oral, Maxilofacial y Estomatología del Hospital Universitario Virgen Macarena (HUVM) desarrolla desde hace más de un año nuevas técnicas en el abordaje de reconstrucciones maxilares.

La reconstrucción de defectos de la cavidad oral y la cara producidos por el cáncer fundamentalmente, pero también por otras patologías como traumatismos, infecciones, etc.., han sido tratados clásicamente en el citado Servicio mediante injertos microvascularizados del propio paciente. Estos injertos se hacían ‘a ojo’ adaptando los mismos al defecto generado, bien por la propia patología en si o por el tratamiento de la misma.

Actualmente la tecnología permite a los especialistas realizar de forma virtual la cirugía y diseñar unas guías de corte para reproducir fielmente la cirugía de tal forma que la reconstrucción es mucho más exacta y predecible.

Todo ello gracias en parte al trabajo conjunto con los ingenieros biomédicos con los que el equipo de Cirugía Maxilofacial planifica cada caso y dando como resultado la fabricación de unas estructuras customizadas de una aleación de titanio. “En base a esa planificación virtual nos diseñan unas placas de titanio a medida del paciente y del defecto generado. Esto logra acortar los tiempos de intervención y sobre todo mejora muchísimo el resultado en términos de función y estética”, explica el coordinador de este área del Servicio, doctor Javier Herce.

Posteriormente y si el injerto ofrece buenos resultados, al paciente se le colocan implantes osteointegrados convencionales sobre el hueso injertado, que normalmente es de peroné, para sobre esos implantes colocar prótesis dentales. “Una técnica que simplifica las reconstrucciones, mejora el resultado de los injertos y nos permite solucionar casos complejos de forma más sencilla” concluye el especialista.

El abordaje multidisciplinar de Ingeniero Biomédico, Cirujano Maxilofacial y Odontólogo permite al citado Servicio del Hospital Macarena obtener unos resultados que hasta hace muy poco tiempo eran impensables.

Avances en la técnica de reconstrucción maxilar en el HUVM
En los dos últimos años el Servicio de Cirugía Oral, Maxilofacial y Estomatología ha introducido muchas modificaciones, a raíz del avance y mejora de la tecnología que ofrece cada día la industria Biomédica.

En este sentido, el Hospital Virgen Macarena ha introducido una innovación que consiste en aplicar ésta técnica para solucionar determinadas secuelas sin necesidad de injerto, diseñando las estructuras ya con las conexiones de los implantes. Una fórmula que evita tener que realizar injertos, disminuyendo la morbilidad sobre el paciente y los costes para el sistema sanitario.

Esta modificación en la técnica es posible llevarla a cabo en el centro hospitalario fundamentalmente, por la experiencia acumulada en rehabilitación protésica con implantes en pacientes oncológicos, a la que se suma contar con los servicios de la Unidad de Odontología Hospitalaria, integrada en el Servicio de Cirugía Maxilofacial. Un factor claramente diferencial respecto al resto de hospitales andaluces.

Para el doctor Herce, “tener esta unidad integrada en nuestro Servicio nos permite planificar los casos conjuntamente con una odontóloga especialista en prótesis sobre implantes, la doctora Guadalupe Cuadrado, y así toda la reconstrucción está pensada desde el principio para facilitar el diseño final de la prótesis, siendo un factor determinante ya que devuelve la funcionalidad y la estética a nuestro paciente”. Dicha odontóloga es la encargada de la rehabilitación protésica final del paciente.

Según refiere el doctor Francisco Mayorga, director del Servicio de Cirugía Oral y Maxilofacial y Estomatología, “la simbiosis entre la bioingeniería y la cirugía reconstructiva del esqueleto facial es una realidad en el Hospital Universitario Virgen Macarena, y supone un arsenal terapéutico tremendamente novedoso e ilusionante, para ayudar a los pacientes que sufren las secuelas de un proceso oncológico o traumático a tener una apariencia más atractiva, mejorando su calidad de vida y su autoestima”.